La vida de delincuencia de Will llega a su fin el día en que es traicionado durante un atraco. Tras 8 años de cárcel, vuelve a ser libre y se propone dos objetivos: ser un hombre honrado y recuperar la relación con su hija. Pero su antiguo compañero secuestra a su hija y le pone precio a su vida: 10 millones de dólares.